Hola mis queridos hermanos, Dios les bendiga. Mi Nombre es María Ovalle, pertenezco a la célula de San Martin con la pastora Milena de Batista y el hermano Ángel Batista. Quiero compartirles el testimonio de respuesta a mi oración porla salvación de mi hija mayor Luzmary Hernández Ovalle, quien se encuentra fuera del país.
Dónde vive mi hija no es muy común que prediquen la palabra de Dios. Yo estuve predicándole a ella acerca del regalo de la vida eterna, quería que ella conociera a mi Señor Jesucristo, sin embargo, ella se reusaba, me decía que todavíano era el tiempo.
Me afané un poco en el momento, pero luego recibí una palabra que el Pastor Carlos Espinoza nos impartía en el matutino de esa semana, donde nos hablaba del regalo de la vida eterna, entender lo que Dios quiere para estos tiempos en suIglesia, en nuestra vida, habló acerca de la familia y las aguas de Salvación, citó Filipenses 4:6 “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acciones de gracias”.
Tomé esa palabra para mí y empecé a orarle a Dios que colocara en el camino de mi hija un discípulo suyo que le hablara sobre su Salvación, creí que ella podría leer su palabra, entenderla y ser sumergida en sus aguas de Salvación. Creíque iba a ser hecho conforme a lo que pedí, y al día siguiente mi hija me escribió haciendo preguntas sobre la Biblia; yo inmediatamente pensé que algo le había pasado y mi sorpresa fue que me contó cómo Dios colocó en su camino un hijosuyo que le predicó y le regaló una biblia.
Ahora mi hija lee la palabra de Dios. Toda la gloria es para Dios, debemos tener fe y creer cuando Dios nos da una palabra la cumple, Él es fiel, Él cumple sus promesas.

Testimonio de Salvación
María Ovalle